Tal como estaba programado, la eucaristía se realizó en la emblemática Plaza de Arcos de la Sede Principal, donde fray Juan Ubaldo LÓPEZ SALAMANCA, O. P., Rector General, en medio de la homilía recordó que “somos la sal de la tierra, desde cada lugar de trabajo, en las aulas de clase, como docentes o estudiantes, los tomasinos hemos nacido con el ingrediente para conservarnos con la cualidad de dar sabor en cada una de las tareas para las que hemos sido llamados”.
Una vez finalizada la eucaristía los asistentes presenciaron un momento histórico para la Universidad; la develación del grupo escultórico de San Alberto Magno y su discípulo Tomás de Aquino, hijos los dos, del padre de los predicadores, Santo Domingo de Guzmán.
Obra del santandereano Juan José Cobos Roa, ilustre egresado de la Facultad de Arquitectura de la Seccional Bucaramanga, y graduado como escultor en la Academia de Arte de Florencia, Italia.